Los beneficios de la vitamina C para la piel
La Vitamina C es vital para llevar una vida sana y equilibrada, ayuda a mantener los cartílagos y huesos sanos, a formar tejido cicatrizante, a rebajar el colesterol, a la absorción del hierro y a mejorar la calidad de la piel. A continuación, te hablaremos acerca de estos y otros beneficios de la Vitamina C para la piel.
Las vitaminas reportan múltiples beneficios al organismo. En conjunto ayudan al buen funcionamiento de todo el cuerpo, si bien cada una tiene sus propias funciones. Los beneficios de la vitamina C para la piel están más que demostrados. Bien sea por ingestión o por su aplicación directa, actúa como un potente antioxidante y regenerador. Estos son sus efectos:
Índice de contenido
1. Neutralizador de los radicales libres
Uno de los mayores beneficios de la vitamina C para la piel es su capacidad para neutralizar los efectos de los radicales libres. Estos agentes nocivos se producen cuando las moléculas pierden un electrón y afectan negativamente a diferentes partes del organismo, entre ellas la piel. Se producen por efecto de la contaminación, el tabaco, las radiaciones o la mala alimentación. La vitamina C protege la piel de los radicales libres evitando la producción de oxidación molecular.
2. Combate las decoloraciones de la piel
El exceso de sol, algunas alteraciones hormonales o diversos tratamientos pueden generar manchas en la piel. Uno de los beneficios de la vitamina C para la piel es que actúa como despigmentante y normalizante de la melanina. Este compuesto aporta color saludable a la piel, ayudando a mejorar el tono en las zonas con manchas.
Aquellas personas que sufren rosácea, el enrojecimiento del rostro por la dilatación de pequeños vasos sanguíneos, también pueden aprovecharse del efecto despigmentante de la vitamina C. La piel de la cara mejora y muestra un color uniforme.
3. Ayuda a tener una piel más tersa
La vitamina C contribuye a la creación de colágeno. Este forma parte de las capas internas de la piel, estirándola y aportándole volumen. Además, la vuelve más tersa y saludable, por lo que tiene un efecto rejuvenecedor.
4. Disimula las cicatrices
Al intervenir en la síntesis del colágeno y la regulación de la melanina, la vitamina C disimula las cicatrices. El colágeno sirve de relleno y actúa como regenerador. La melanina, por su parte, difumina la decoloración.
5. Tiene efecto exfoliante
Aplicada directamente sobre la piel, la vitamina C tiene efecto ligeramente exfoliante. Cuando está limpia, la piel se ve más saludable. Además, induce a la regeneración celular, por lo que el rostro se ve más brillante. Estos factores, unidos a los efectos cicatrizantes y despigmentantes hacen que sea perfecta para mejorar la calidad de la piel.
6. Reduce la inflamación
Al tener efectos antiinflamatorios, la vitamina C es muy conveniente para rebajar las irritaciones a consecuencia de un tratamiento en el rostro. En ocasiones la piel reacciona con rojez e inflamación. Esta vitamina ayuda a recuperar mucho antes la apariencia natural.
7. Refuerza la barrera de la piel
La piel actúa como mecanismo de protección, evitando la entrada de patógenos y manteniendo los niveles de humedad. La vitamina C ayuda a mantener en perfecto estado esta barrera, gracias a que interviene en la formación de ceramidas y otros lípidos.
Combinaciones saludables de la Vitamina C
La combinación de Vitamina C con otros compuestos puede mejorar los resultados. Por ejemplo, la mezcla de Vitamina E, Vitamina C y Zinc o la Vitamina C y Hierro. Te explicamos cuáles son los beneficios que tienen sobre la piel.
Vitamina E, Vitamina C y Zinc
Los tres compuestos, Vitamina E, Vitamina C y Zinc, tienen un potente efecto antioxidante que protege de los efectos negativos de los radicales libres. Pero no solo eso, a los beneficios de la vitamina C, se suman los siguientes:
- Vitamina E. Refuerza el sistema inmunitario y mejora la circulación, factores básicos para mantener la piel sana y potenciar su regeneración.
- Zinc. El Zinz es un mineral que estimula la producción de enzimas, que juegan un papel muy importante en la cicatrización de la piel.
Vitamina C y Hierro
El hierro está estrechamente ligado a la producción de glóbulos rojos, que transportan el oxígeno a las células. Para mantener las células de la piel oxigenadas y facilitar su regeneración, es importante que el cuerpo asimile bien este mineral. La vitamina C interactúa con el Hierro, facilitando su asimilación por el organismo.
¿Cómo conseguir Vitamina C?
La vitamina C está presente en gran cantidad de alimentos, especialmente en frutas y verduras. Por eso, la principal manera de obtenerla es por medio de una alimentación variada equilibrada. Pero, es posible que aun manteniendo una buena dieta sea necesario un refuerzo. Para conseguir un extra de vitamina C para el cuidado de la piel, puedes obtener cremas o ampollas para su aplicación directa. Otra manera es consumir complementos alimenticios.
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